miércoles, 27 de enero de 2010

Ave de paso

Caminaba a ritmo de Rock&Roll. Bebía capuchino con whisky acompañado de una buena dosis de melancolía. Insultaba en inglés y se reía en chino. Se levantaba queriendo matar al gallo de la vecina y se acostaba queriendo dominar el mundo. Siempre fue más de los Rollings que de los Beatles, pero amaba a Lennon. Los días de lluvia se perdía entre las miles de gotas que surcaban el cristal y se emocionaba con cada apuesta de sol. Acompañaba el baile de las hojas en otoño, de los copos de nieve en invierno y de las mariposas en primavera. En verano se marchó, supongo que aquel negro -del chiringuito de la playa- bailaba mejor en la cama que yo.

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