jueves, 25 de febrero de 2010

So come on home



Escucho tu respiración detrás de mi y me entran unas ganas tremendas de abrazarte muy muy fuerte. Tan fuerte que te corte la respiración y tu último suspiro muera en mi oído. Tan fuerte que sienta mi piel arder, y se funda con la tuya, formando un mar de lava. Pero no puedo. Mis manos, sobre mis piernas siguen sin poder moverse. Mis manos como espectros creen tocar tu piel y tu pelo, pero siguen ahí, conformándose con el tacto de mis medias rotas. Y es que creo alcanzar el éxtasis al creer acariciarte, abrazarte, besarte.Porque nada es tan electrizante como el sabor de la marihuana en tus labios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

REVOLUCIONES