domingo, 6 de marzo de 2011

A pesar de que siempre se me dio bien hablar en pasado, los pretéritos y andar torcido.

 Creo que le estoy pillando el tranquillo a esto de vivir. Y no lo digo porque me encuentre pletórica, ni me sienta la adolescente más feliz de este país hipócrita. Tal vez sea porque estos días me he dado cuenta de qué es lo verdaderamente importante. Bueno, sinceramente lo verdaderamente importante no tengo ni puta idea de lo que es,  pero creo que se acerca a llegar tarde a casa, disfrutar con las personas que crees que verdaderamente merecen el final con algodón de azúcar, canciones que en algún momento se convirtieron en la banda sonora de tu vida , subrayar frases hipnóticas en un libro, ver una buena película mientras comes chuches o bebes café, verte a cualquier hora fumar y reír.. Y no sé, no estoy feliz, pero casi.

Ahora mismo tengo unas ganas inmensas de vivir, de beberme el mundo como si fuese cerveza, de que te cueles en mi habitación de madrugada, compartamos la cama y dibujes mi espalda con la yema de tu dedo índice o cualquier otro.

Mañana lo más loable es que está sensación desaparezca, que vengan los planes de escape y las ganas de correr irremediablemente en círculos. Pensar en pretérito, las escenas en blanco y negro, la pereza y los tiempos de espera. Pero mientras tanto lo quiero todo. Quiero lo inabarcable.

2 comentarios:

  1. wow!!
    esta actualización es muy buena. Esa sensación momentánea de inmensidad, de sentirlo todo en un segundo.
    Y esta frase 'Y no sé, no estoy feliz, pero casi.'
    lo resume todo.
    muá

    ResponderEliminar

REVOLUCIONES